En promedio, entre 2000 y 2007, el 58% del total de personas desempleadas está por debajo de 29 años de edad. Cada año se incorporaron a la población económicamente activa unas 13,817 personas jóvenes de entre 15 a 24 años, de los cuales solamente 2,586 encontraron empleos.
Los empleos de las mujeres son también en el sector informal. Dos de cada tres está empleada en ese sector y mientras más elevada es la tasa de pobreza de una provincia hay menos empleos para las mujeres. En general, son empleos inestables, vulnerables y poco valorados.
Además, el 45,9% de los empleos nuevos creados en el país entre 2000 y 2007 corresponde a trabajos domésticos, peluquerías, colmados y choferes, renglones de muy baja productividad. En términos absolutos de los 72 mil nuevos empleos creados en ese periodo aproximadamente el 46% fue creado en esas cuatro categorías.
Por esta razón, este informe propone políticas específicas para impulsar el empleo de calidad en jóvenes y mujeres así como en otros colectivos con problemas específicos como personas con discapacidad.
Todo esto se puede encontrar en el informe “Política social: capacidades y derechos” que publica la Oficina de Desarrollo Humano del PNUD a solicitud del Ministerio de Economía el cual se pondrá a circular el día 9 de junio del 2010 a las 6:00 pm en el Auditorio Manuel del Cabral de la Biblioteca Pedro Mir de la UASD.